Cuando lees un libro de UI/UX, normalmente se corroboran ideas que ya tenías previamente como diseñador, ya sea por la educación o la experiencia. En el caso de No Me Hagas Pensar de Steve Krug, es un hito completamente diferente.
Con éste libro no solo corroboras cosas previas, aprendes nuevas y obtienes ejemplos claros, prácticos e ilustrados de por qué funcionan y por qué no determinadas técnicas en nuestros diseños web.
No resumiré el libro, no para ahorrarte tiempo —No cometas el error de consultar resúmenes y no leer el libro original—, si no que trataré de inspirarte y animarte a leerlo.
Steve Krug —el autor— es un consultor de UX (Experiencia de Usuario) y como tal es muy bien remunerado por diversas empresas, sin embargo, cuando nuestro presupuesto no nos da lo suficiente como para contratar a un experto, este libro nos dará una clara visión de cómo cumplir con lo básico para poner nuestro producto/servicio a prueba frente a los usuarios.
Ya que ejemplifica reiteradas veces que es muy distinto cómo percibimos nosotros el negocio y otro los usuarios finales. Primero dándote las reglas generales y ofreciendo herramientas prácticas para que te forjes un sentido común de qué se espera de las cosas y cómo se espera que funcionen hasta las pruebas reales (User Testing) con tus usuarios.
Lo anterior, hace que éste libro sea de lectura general, tanto para profesionales como no-diseñadores que quieren mejorar la experiencia del cliente (UX) de sus servicios.
Para mí, es una verdadera biblia del diseño y en adelante un Must Read por parte del equipo de Eón.
Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida por Jonathan Ortiz (Eirán) (@eirans) el
Por supuesto analiza con ejercicios visuales elementos básicos como el espacio en blanco, la charla de relleno, el formateo de textos y cómo ayudan a la lectura, el acomodo de los menús y la relevancia de colocar en ellos elementos útiles, elementos interactivos como botones que “deben parecerlo” —que suena obvio, lo sé—.
Ésto último quizás por la popularidad del minimalismo que a veces simplifica demás conceptos que no a todos les queda claro. Y cómo usar a nuestro favor las convenciones, que son un conocimiento global de las reglas operacionales de las cosas: como las luces de un semáforo —todos entendemos cómo funcionan—.
No me hagas pensar
Está implícito en el nombre, aborda cómo desde el punto de vista del visitante, éste interactúa con nuestro sitio, qué es lo primero que hará en nuestro sitio, qué tan fácil será entender la navegabilidad y a cuantos clics se encuentra de hallar lo que busca.
Es una verdadera guía en la cual apoyarse cuando te enfrentas a un diseño desde cero y a un rediseño, para analizar dónde estás parado y qué falta en un diseño.
Por su puesto, también obtendrás una serie de tips para recopilar verdaderos análisis de reacciones con clientes reales sin que tengas que invertir en consultorías con Focus Groups para sacar muestreos enormes, con un equipo de una o dos personas.
No Me Hagas Pensar, obvia cosas que quizás demos por sentadas pero que en la práctica no se aplican debido a que en los ambientes corporativos algunas decisiones están tomadas por sesgos de información o de contentillo de ciertos ejecutivos.
Haciendo que con estudios y ejercicios puedas mostrar a tus clientes y colegas información dura. Me parece que es el sustento que hacía falta para apoyar cualquier cambio significativo en diseño y experiencia de usuario en un sitio web.
Es un libro caro de conseguir en México, aproximadamente $1,000 MXN en español y $400 MXN en inglés (Así lo conseguí en Amazon), pero que definitivamente vale la pena.